Hace unos días, antes de entrarle a "Los Faquires", me fijé en una línea blanca que surcaba de abajo a arriba la pared norte del Curavacas hasta morir en la misma cima Oeste. Al hacer la vía, a la izquierda, observé su entrada, parecía factible pero habría que estudiarlo. Ya en casa, recopilé todas las fotos que pude de la pared y Tente me confirmó que estaba sin hacer.
Como las condiciones en la zona son excepcionales y la meteo del finde se presenta óptima, le propongo darle al asunto. Si hay alguien indicado para ello es él, conocedor como nadie de todos los rincones y secretos de esta montaña.
Acepta la propuesta y por cuarta vez en 12 días, vuelvo al Curavacas. En esta ocasión, trazo un croquis previo a la escalada, la línea es tan clara que parece inexplicable que nadie la haya tomado como objetivo.
En un amanecer de luna llena, la cara norte de la gran Dama se muestra exultante vestida con sus mejores galas heladas. Con todo en el arnés escalamos por buen hielo hasta hacer reunión a la entrada de "Los Faquires", sacamos las cuerdas y vamos al lío.
L1: 40 m/3
Sucesión de resaltes con hielo perfecto que se protege por la izquierda en roca. Reunión en la bifurcación también en roca reforzando, en este caso, los tótems con un clavo.
L2: 50 m/4
Pequeña vira ascendente a la izquierda para entrar en una goulotte estrecha y encajonada con dos resaltes a 85°. Protección en roca y con tornillos, reunión en roca a la izquierda.
L2. |
Se remonta el nevero hasta la cima Oeste donde hacer reunión al otro lado de la arista.
Fotos que nos hacen unos amigos desde la cima del Curavacas. |
Fotos que nos hacen unos amigos desde la cima del Curavacas. |
Por fin salimos al tibio sol que entra por el sur, contentísimos por la belleza de la vía recogemos el material con tranquilidad. Recorremos una cresta con gran ambiente hasta el Corredor de los Gránulos, que ha sido el que hemos elegido para bajar.
Satisfechos. |
Arista. |
Sí hace unos días la nieve estaba dura, hoy lo está más, destrepamos 400 metros de cara a la pared, imponiendo un castigo adicional a nuestros pies y gemelos. Este corredor tiene su gracia, bloque empotrado y resalte incluido, para hacer una disfrutona ascensión, pero hacerlo de esta manera supone un pequeño suplicio.
Destrepando. |
Finalmente recorremos en horizontal toda la cara sur de la montaña hasta enlazar con la normal para volver con las últimas luces de la tarde a Vidrieros. Dice Tente que hacía muchos años que no abría nada nuevo en "su" montaña. Yo le digo que, como los buenos "juergas", esta será la penúltima. Y la próxima también.
La vía, salvando las distancias, tiene cierta similitud, en relación a "Los Faquires", con la "Directa del Fraga" en relación a "La Diagonal". Ambas salen hacia arriba en línea recta de sus respectivas diagonales. Una en la Norte y otra en la Noreste.
Y con esa reflexión llegamos al coche.