Nos informan de que la Estrecha del Friero, también conocida como Corredor Norte está este principio de abril en perfectas condiciones. Elegido el día me acerco a Cordiñanes y duermo en la Pensión del Tombo. A las 4h30, Martín y yo partimos en una bella pero dura aproximación hasta la vega de Asotín. Son las 6h30 cuando ya pertrechados nos disponemos a entrar en el corredor, el más largo de España según dicen.
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Croquis de la vía.
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Inmediatamente nos pasa una cordada formada por Tente Lagunilla y dos amigos suyos. La parte inicial ronda los 45° y se progresa fácil tras superar una rimaya por su izquierda.
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Parte inicial del corredor nada más amanecer.
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| Camino a seguir. |
Proseguimos por una zona a 50° con una nieve perfecta que da muchísima confianza, poco a poco el corredor se va estrechando.
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| Se va estrechando. |
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| Y se va inclinando. |
Pronto llegamos al primer resalte duro, son 3 metros a 80° con buen hielo arriba y pies un tanto huecos, un empujón traccionando de piolets y se echa el pie derecho a roca para luego llevar el izquierdo ya a hielo. Primera dificultad superada.
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| Saliendo del primer resalte. |
Seguimos subiendo y aparece el famoso túnel de nieve, se pasa por su interior a 70° disfrutando de su espectacularidad.
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En el túnel.
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En el túnel.
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| Saliendo del túnel. |
Superado este espectacular pasaje se entra en otro tramo a 50°-55° que termina junto a una cueva en la nieve que permite descansar los gemelos, comer algo y montar una cómoda reunión para afrontar la zona siguiente, tal vez la más complicada del corredor.
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Una mirada hacia atrás.
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| Llegando a la cueva. |
Estamos ante un resalte en roca pulida que parece difícil, tenemos delante a dos miembros del GREIM de Galicia que acaban de adelantarnos y nos fijamos en cómo lo afrontan. La estrechez del mismo permite iniciarlo en oposición como una chimenea, después un giro y el hielo de encima permite clavar los piolets y traccionar.
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El Greim afrontando el resalte.
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| Con detalle. |
Inmediatamente encima de esta dificultad se afronta otra similar algo más complicada, otro tramo vertical de roca que se entra traccionando con el piolet izquierdo en roca, metiendo la punta del crampón derecho en una mínima fisura para llegar así con el piolet derecho a un hielo frágil y quebradizo donde traccionar. Después el largo se hace más amable en un mixto disfrutón.
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Saliendo de las dificultades.
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| Gozando. |
Poco después se llega al hombro con la satisfacción de haber vencido a este larguísimo corredor. Mil metros más abajo queda su inicio. Sin embargo las dificultades no han acabado, queda un expuesto flanqueo que lleva a una pala helada y también de gran exposición y unos 50° que termina en la arista cimera.
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Saliendo al hombro.
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Pala hacia la arista.
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Para llegar a cima solo resta una fácil arista que de modo elegante y con unas vistas increíbles permite saborear el momento.
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| Es el Friero en efecto. |
Tras las fotos y comer algo iniciamos el destrepe de la pala final, se hace delicado y lo hacemos de cara a la pared clavando puntas de crampones y piolets en una nieve francamente dura. Llegamos de nuevo al hombro y la gozamos en una bajada ya fácil por la canal de La Chavida.
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| Canal de La Chavida. |
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| En el rápel. |
Poco después llegamos al rápel que nos permite acceder a una canal que termina en la vega de Asotín a la altura del inicio del corredor que hemos escalado.
Nos queda bajar a Cordiñanes desandando la senda por la que subiendo no pudimos contemplar las vistas con la noche cerrada. Ahora son preciosas. Una hora más tarde, tras 11 horas de actividad, nos tomamos una cerveza en Cordiñanes.
Gran jornada con gran compañía.
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| Ya cerquita del final |
Muy bonitas imagenes. Solo verlo cansa y da mucho vértigo. Que bien te lo pasas Santi.
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